Un líder religioso polígamo que afirmaba tener más de 20 “esposas” espirituales, incluidas 10 menores de edad, fue condenado a 50 años de prisión el lunes por obligar a niñas de tan solo 9 años a someterse a actos sexuales criminales con él y otros adultos, y por planear secuestrarlas de la custodia protectora.
Samuel Bateman, cuyo pequeño grupo era una escisión de la secta que una vez lideró Warren Jeffs, se ha declarado culpable de una trama de varios años para transportar niñas a través de fronteras estatales para sus crímenes sexuales, y posteriormente de secuestrar a algunas de ellas de la custodia protectora.
Bajo el acuerdo, Bateman se declaró culpable de un cargo de conspiración para cometer traslado de menores para actividad sexual, que conlleva una condena de 10 años a cadena perpetua, y un cargo de conspiración para cometer secuestro, punible con hasta cadena perpetua. Fue condenado a 50 años por cada cargo, a cumplirse de manera concurrente.