Nadie la conoce, ni siquiera se imaginan quien.

Migue, como lo conocen sus amigos, es el actual alcalde de ciudad Victoria capital de Tamaulipas, un hombre creado en la cultura del ahorro árabe, es considerado codo a más no poder, pero la verdad es que no lo comprenden y menos lo entienden… veamos porque digo lo anterior:

Cuando él se desempeñó como titular de la Comapa Victoria la saneó y dejó funcionando con saldos a favor, hecho que le fue tomado en cuenta para ser llamado de última hora a la alcaldía.

Es escrupulosamente ordenado con sus números a grado tal que el presupuesto de ingreso para el dos mil once fue de 672 millones 683 mil 253 pesos con 66 centavos, y él tan solo gastó 650 millones 960 mil 269 pesos con 96 centavos… dedicó con coraje un 4.01 % al pago de la deuda externa del municipio, equivalente a poco mas de 26 millones de pesos

Se peleó con proveedores para reducir el gasto y que le alcanzara el presupuesto, redujo salarios y prestaciones en donde fuese necesario, exigió a la contraloría que auditara entre la gente que realmente estaba trabajando y la herencia de quienes se presentaban a cobrar en ventanilla; armó su equipo de trabajo con personajes probados y les leyó la cartilla, sobre los escasos dineros del municipio… y no tuvo empacho en abrir la puerta a los mismos amigos que pensaron que el ayuntamiento era un botín de guerra, y se quejaban de los bajos salarios.

Su mortificación era que a su amante los números no le cuadraran, porque él sabía que las mujeres son veleidosas e interesadas, pero que los números no mienten.

Sabía que el presente y la historia le exigen resultados y la fórmula conocida y transitada por él son los números fríos. Poco le importa que le digan que es bien fundillo, que nada se llevará cuando se muera, él es fiel a su amante la contabilidad, conocedor que de hacer las cosas correctas con la cabeza y no con el corazón le traerá simpatías por el resultado, a pesar de que socialmente a nadie le agrade…