Por José Gregorio Aguilar
Decenas de derechohabientes siguen denunciando a los medios de comunicación la mala atención que reciben en la clínica del ISSSTE de Victoria, en especial aquellos pacientes que requieren de citas con especialistas quienes tienen que esperar hasta el próximo año para ser atendidos, con el riesgo de agravar su salud o perder la vida.
Al respecto, la maestra Ana Luz Sacramento, derechohabiente del ISSSTE en esta capital, explicó que ya tiene como medio año sin recibir el tratamiento contra el glaucoma el cual debe seguir por indicaciones médicas.
“Este fin de semana asistí a mi clínica para definir si lo reiniciaba, tranquilamente me dicen que esa especialidad no labora los fines de semana desde hace dos meses; algo que nunca me notificaron, aunque tienen mis datos”.
De tal suerte que el guardia le sugirió que fuera hoy lunes para solicitar cita con el oftalmólogo “acabo de ir y me dicen que no hay citas hasta el 2024 porque solo hay uno que es jubilado, mientras tanto que le haga como quiera con riesgo de perder la vista o consultar con un particular y pagar también los estudios”.
Un caso similar también llegó a este medio de comunicación, en donde la maestra Carmen Bueron quien tiene problemas fuertes en su columna, se va a tener que aguantar el dolor porque le dieron cita con el traumatólogo hasta el próximo año.
“Porqué no hay citas, quien me dará el medicamento; entonces debo ir con un particular y yo comprar el medicamento porque hasta el 2024 habrá citas”.
Estos son tan solo dos ejemplos que ilustran con mucha claridad que los discursos de las autoridades no son mas que letra muerta y que las clínicas del ISSSTE siguen igual o peor que antes, pues arriesgan la salud y la vida de los derechohabientes y los obligan a gastar en medicamentos, consultar con médicos particulares.