La tila siempre ha destacado por ser un relajante para nuestro organismo en momentos de gran estrés o nerviosismo. Lo cierto es que la tila tiene cualidades antidepresivas y otros muchos beneficios que pasamos a contarte.
El té de tila es junto con el té de manzanilla, el té negro y la menta poleo la infusión más consumida en Europa como remedio casero para tratar una gran variedad de dolencias y patologías. La tila se obtiene de la flor de este árbol y aunque siempre se la ha considerado perfecta para tranquilizarnos ante momentos de estrés, contiene otras muchas propiedades. Para empezar, la tila, es un potente diurético que nos ayuda a depurar el organismo, otro de sus grandes beneficios. La tila posee contenido en taninos, glucósidos, mucílagos, carotenos, suercitrósidos y vitamina C. Es un buen aliado para recobrar el sueño en personas que sufren de insomnio. Es muy bueno para recuperar el apetito y mejorar el estado de nuestro cuerpo en los procesos catarrales.
Muchas personas timan tila para cuidar o curar algún tipo de problema de su piel y es que ayuda a mejorar y calmar cualquier tipo de alteración sufrida en la piel. Ayuda a mejorar los escozores, enrojecimientos y todo tipo de afecciones de la piel. Su poder calmante ayuda a llevar cualquier tipo de dolor o molestia que tengamos.
La tila nos calma, nos relaja, nos ayuda a controlar la ansiedad y todo tipo de problemas de nerviosismo. Si padeces calambres te ayuda a recuperarte y si tu aparato digestivo te da la lata, también te ayudará con este problema. Relacionado a esto del aparato digestivo es el control de nuestro peso y es que la tila, gracias a sus propiedades diuréticas nos puede ayudar a mantener un cuerpo en perfectas condiciones, libre de sustancias contaminantes que empeoran nuestra salud poco a poco; aunque para ello haya que tomarlo a menudo.