Según expertos en la materia, es mil veces más seguro viajar en avión que en automóvil. De acuerdo a estadísticas, por cada 4.000.000.000 de pasajeros de automóvil hay 3.000.000 de muertos y 95.000.000 de heridos. En cambio, cada 1.800.000.000 de pasajeros de avión hay 900 muertos y un número casi insignificante de heridos.

Lo cierto es que últimamente en todo el mundo está de moda que haya siniestros mortales relacionados con accidentes de aviones o helicópteros.

En México no ha sido la excepción. De hecho en la época reciente dos Secretarios de Gobernación del sexenio de Calderón murieron en un avionazo. Nos referimos a Juan Camilo Mouriño y Francisco Blake Mora.

La famosa cantante de banda, Jenny Rivera, también falleció hace algunos meses cuando su avioneta se derrumbó cuando viajaba de Monterrey a Toluca.

Apenas el pasado martes, una avioneta de la Procuraduría General de la República, se desplomó en Zacatecas dejando saldo de seis personas muertas.

El procurador de Zacatecas, Arturo Nahle García, confirmó que el accidente ocurrió en el municipio de Morelos. Informó que las víctimas son un agente del Ministerio Público, dos  ministeriales, el piloto, el copiloto y un mecánico.

Lo curioso del caso, es que en  ese mismo avión viajó a Zacatecas el Procurador General de la República Jesús Murillo Karam el pasado 23 de marzo».

¡Aguas!, hablamos de un problema serio, sobre todo para el sector de la clase media-alta de la sociedad y para los políticos que son los que se trasladan regularmente por vía aérea.

Debiera de ser un tema a revisar y prioritario para la Secretaría de Comunicaciones y  Transportes, para la misma clase empresarial y hasta para el mismo Presidente de la República.

No es posible que estén ocurriendo esta clase de percances y cada vez con más frecuencia. Con Calderón fueron dos avionazos que derivaron la muerte de dos de sus principales colaboradores… ¿Con Peña Nieto, cuantos avionazos habrá?