La veda electoral solo ha servido para darle en la torre a la población. En palabras simples, parece que fue creada solo para “fregar” a los más necesitados.
No es nada más que un inútil y desatinado acuerdo entre el Presidente Peña Nieto y los partidos en el marco del Pacto por México, disque para que no haya desvío de recursos hacia las campañas políticas.
Parece que esto de las campañas políticas y de las elecciones, lejos de ayudar, trae consigo más trabas y problemas que no ayudan en nada a la sociedad
“Malditos políticos”, dirían los afectados por este “acuerdito” que se sacaron de la manga. Por eso estamos como estamos en México, a los que dirigen el destino de nuestro país, les vale madre lo que suceda con las personas que viven en la miseria y que necesitan los apoyos.
Aquí en Tamaulipas, gracias a este receso por el periodo electoral, 400 trabajadores de la Secretaría de Desarrollo Social y del Programa Oportunidades, fueron suspendidos mientras acaba todo el circo de las elecciones.
Igualmente se han dejado de entregar más de 16 mil contenedores de agua de los llamados “rotoplas”, tanto que hacen falta ahora que están las temperaturas muy altas y el agua escasea.
Qué poca, que poca sensibilidad verdad, para hacer esto con la gente. Los responsables de esta veda no merecen ser llamados de otra manera que no sea decirles, que son unos miserables.
Más allá de que se busquen blindar de cierta forma los comicios del próximo 7 de julio, para que no existan desvíos de recursos, debieron implementar otras formas para no suspender los apoyos sociales.
Que se pongan en los zapatos de aquellos que viven al día y que se den cuenta que ese tipo de ayudas a través de los programas sociales, les son muy útiles para subsistir a las personas de escasos recursos.