México, D.F. (Agencias).- Atrás quedaron los costosos y lujosos atuendos con que vestía la dirigente vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo. Hoy, ataviada con una sencilla blusa de tono beige que visten las reclusas del penal de Santa Martha Acatitla, la lideresa se presentó a rendir su declaración preparatoria ante el Juzgado Sexto Penal, acusada de los delitos de delincuencia organizada y operación con recursos de procedencia ilícita por más de dos mil 600 millones de pesos.

Las primeras imágenes que se transmitieron de Gordillo Morales, a través de las pantallas televisivas que difundieron en vivo la presentación, fueron a las 12:53 horas de este miércoles –30 minutos después de iniciada la audiencia–, precisamente en el momento en que el representante del juez Sexto Penal, Alejandro Caballero Vértiz, le leyó los cargos que le fincó la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda.

A tras de la rejilla, junto a Gordillo se alcanzaba a apreciar, a su izquierda, a José Manuel Díaz Flores y, a su derecha, a Isaías Gallardo Chávez, señalados junto con Nora Guadalupe Ugarte Ramírez –quien se encuentra hospitalizada en calidad de detenida– de ayudarle a  triangular los recursos presuntamente desviados de las cuentas del SNTE.

En el juzgado sólo estuvieron presentes los abogados Arturo Germán Rangel y la hija de la lideresa, Maricruz Montelongo Gordillo, quien acudió al Reclusorio Preventivo Oriente acompañada de dos personas.

La maestra fue detenida a las 22:50 horas del pasado martes 26 en el aeropuerto de Toluca, a su llegada de San Diego California; una hora más tarde, a las 23:55, en un café, fueron detenidos dos de sus supuestos cómplices Gallardo Chávez y Díaz Flores. Ugarte Ramírez, en su casa.

Al otro lado de la rejillas, el juez que lleva la causa les notificó que de acuerdo con los delitos acreditados por la Procuraduría General de la República (PGR).

–¿Tiene alguna duda? –le preguntó el representante del juez

–Por mi parte no –contestó la lideresa, sin alterarse, con voz queda, pero visiblemente disminuida.

El representante le informó que las constancias aportadas en su contra, están contenidas en seis anexos: el principal, en el cual obran las aperturas de dos cuentas bancarias, así como de diversas transacciones y disposiciones de dinero que se hicieron de dichas cuentas con respecto al los fondos del SNTE.

Elba Esther suspira hondo.

Otros medios de prueba que se tomaron como base para liberar la orden de aprehensión son dos dictámenes en materia de contabilidad: el primero del 21 de febrero de 2013, realizado por peritos de la SHCP y, el segundo, emitido el día 22 de febrero de este mes por peritos de la PGR.

Posteriormente, se les notificó que tenían derecho a declarar o de abstenerse, por lo que les otorgaría tiempo para que dialogaran con sus abogados. Además, les notificó que ninguno de los acusados alcanza libertad bajo fianza y que cuentan con un plazo de 72 horas para allegar pruebas en su defensa, periodo que, a solicitud de los abogados defensores, se podía ampliar hasta un término de 144 horas.

A todo, la maestra asentía con un ligero movimiento de cabeza. Su altivez y arrogancia características la abandonaban.

–¿Tienen alguna pregunta o duda al respecto? –le preguntan a  la líder sindical.

–No –responde, mientras vuelve el rostro en espera de la respuesta de Díaz Flores y Gallardo Chávez, quienes la secundan.

Posteriormente, el juez, ordenó la separación de cada uno de los detenidos, para que previa entrevista con su defensor, pudieran manifestar si querían declarar algo sobre los hechos y los anexos probatorios mencionados.

Eran las 13:05 horas, José Manuel e Isaías, fueron enviados a un cubículo. Elba Esther, se recargó en la pared y dejó caer la cabeza en el muro, como si tratara de tomar aire y disimular su desaliento. Languidecía, pero se negaba a postrarse.

A las 14:15 horas, una vez concluida la declaración preparatoria, la primera en abandonar el juzgado fue la subprocuradora jurídica y de asuntos internacionales de la PGR, Mariana Benítez Tiburcio, quien confirmó que la Procuraduría en esos momentos estaba  realizando cateos en las propiedades de la líder del SNTE y de sus presuntos cómplices.

Así lo declaró a su salida de los juzgados de Distrito del Reclusorio Preventivo Oriente, al asistir a la audiencia que se celebró para notificarle a Elba Esther lo cargos que la PGR le imputó.

Minutos después, Maricruz Montelongo Gordillo, hija de la lideresa, salió del edificio que alberga al Juzgado, la única que se ha presentado a las diligencias de su señora madre. Iba acompañada de las mismas dos personas que arribaron con ella, su rostro estaba desencajado, demacrado, agotado. Se negó a responder preguntas de los reporteros.

Su madre, durante la declaración preparatoria, se dijo enferma de insuficiencia renal, hipertensión arterial, hepatitis tipo C. Incluso, su médico Jesús Francisco Walliser Duarte, pidió que la líder del magisterio sea internada en un hospital para que le brinden cuidados intermedios porque desde hace una década padece de dos aneurismas seculares, un quiste aracnoideo parasagital izquierdo parecentral, atrofia de la pared muscular abdominal, descalcificación moderada en la cadera izquierda, además de una lesión en el tobillo derecho.

Al final del día, Elba Esther Gordillo estaba de regreso en su celda, en el reclusorio de Santa Martha Acatitla. El penal para Mujeres.