Al emperador Nerón le gustaba exhibirse en un teatro que se encontró gracias a excavaciones que probaron la ubicación del que fuera un lujoso edificio del Imperio romano sólo conocido a través de textos antiguos: la construcción estuvo sepultada más de mil años a pocos metros del Vaticano.

Arqueólogos de la ciudad de Roma hallaron una parte del Teatro de Nerón al iniciarse las obras para la construcción de un estacionamiento del nuevo hotel en el patio del Palacio de la Rovere, un edificio renacentista levantado en el siglo XV sobre construcciones medievales.

«Con esta excavación pudimos plantear una propuesta de identificación que se basa en una serie de pistas arqueológicas que son muy consistentes entre sí y que nos llevan a identificar este espacio como el antiguo Teatro de Nerón», explicó Alessio de Cristofaro, uno de los arqueólogos del ayuntamiento de Roma.