Vengo de tus poros, viajo en una tabla que golpetea el piso. Vengo de plano de tu espalda, hace rato dejé pasar una hora mirándola. La estación más cercana son tus brazos, los espejuelos sueltos. En su carrera, el sol olvidadizo dejó aquí el invierno. Hago como que llueve, y es tu risa, por si esto fuera un sueño, en cada muelle, en cada música.
Si una noche de otoño el viajero encuentra una calle, puedes escribirla cuando cierres los ojos que con despertar sea un libro, un muro como el viento en un teatro lleno. La tenue luz de una lámpara leerá el poema a las personas con el suelo, avanzando más que los peregrinos.
El arte de tu boca es una línea recta frente a un cuadro, un ejército de profetas oblicuos, secreta mirada con otro que ve lo mismo, es un demiurgo pensando algo parecido pero de otra manera, con una palidez distinta. En serio.
Habitamos un poema. Es un poema, es un poema no decir, no escuchar no entender, ser nada más, como quiso el poeta, ser en la vida romero un gilguero y un aguijón negro.
Veo un cuadro en tu mirada, un abismo, un fondo de todo, un lenguaje vacío, un azar de ausencias. La experiencia fundamental de la poesía es la otra poesía, la que se quedó en las rosas, la pasión que no pudo ser arrancada con los dedos.
Quedaste en la tinta de las formas, en la naturaleza quedas, en el índice de fuego, siempre señalada por hermosa , quedas. Eso eres ahora no hecha poema todavía. Un hacha en mi cabeza.
Ahí habitamos, en el amor, en la obra no dicha, en lo que realmente transforma las cosas y los objetos editoriales. Ahí estás. En hilera adentro hay un poema concluido que nadie reconoce, apenas hay esbozos de tu esencia.
Un solo aguijón cruza el incandescente tiempo intocable, más exacto, el cual está ahí para mencionarlo, dale una fecha, otórgale un despliegue de sensaciones y formas, dale una cita y un espacio tibio rozando el cielo.
Tu cabello como un brioso corcel, es la revelación de un secreto escurridizo, lejano, o tan cercano que es invisible. Tan irracional es lo que pienso, ahora que lo pienso.
Poco a poco el camino es la industria del desierto lleno de carros, el humo es la facturación del olvido, mientras el espectador saliendo del teatro- creyéndose otro- se va disipando entre la gente.
Y eras el tiempo, el punto y seguido, el simple regreso. Escogiste los momentos y los resuelves en el espacio que se va alargando en las narices, en los reflejos, en los ojos de otros que no conozco.
Cuentan que cuando el agua se va a donde vive, con quien se formó en un estanque, no vuelve al cuerpo convertido en deshecho, sino que se transforma en mar donde flotan los buques.
Es hora del viento, el aire penetra al cuerpo y me brinda el sólido oxígeno que no es sino un simple reflejo, un todo que es pasado, memoria de árbol, hojas que dejaron de serlo para moverse invisibles con tu recuerdo.
Uno reconoce el mar cuando lo ve de lejos, de cerca en la mano es confuso, es calma llanera de un pozo, luces reflejadas en un charco de agujeros negros.
Con las ancias ancianas recorro las pequeñas casas del follaje s8n muros, me desplaza tu perfume, la curiosidad acecha en una mano sin que la otra se de cuenta, es difícil ahora estar de este lado del sol en pleno invierno.
Uno es el agua, pero el tiempo que fuimos ahí queda estancado, estacado por el misterio de los seco. Cuando el viento arrecia, el agua regresa. El fuego hace volver al agua que lo conforma, que lo confina, que lo resuelve. Un día el fuego fue agua, como el escándalo fue silencio. Y yo nunca tuve qué decir. Nuestros labios juntos son el espacio que le falta a este mundo. Mis palabras fueron sólo fragmentos.
TENGO OTROS DATOS
ASISTE GOBERNADOR DE TAMAULIPAS AVA A INFORME DEL PRESIDENTE DEL SUPREMO TRIBUNAL DE JUSTICIA Y DEL CONSEJO DE LA JUDICATURA DEL ESTADO
Asiste el gobernador de Tamaulipas Américo Villarreal Anaya a la Sesión Plenaria, Extraordinaria, Pública y Solemne del Pleno del Supremo Tribunal de Justicia, con motivo del informe del Magistrado Hernán de la Garza Tamez, Presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo de la Judicatura del Estado de Tamaulipas, correspondiente al año 2024.
Durante su discurso el gobernador hizo un reconocimiento a la labor de los magistrados y magistrados e hizo una reflexión en el entorno de que los servidores públicos jueces y magistrados serán electos por el pueblo. Recordó los eventos del 2024 en el que juntos Ejecutivo y judicial celebraron el bicentenario de la creación del Estado libre y soberano de Tamaulipas.
HASTA LUEGO