No voy me llevan, dicen aquellos que se resisten a irse. Te vas porque yo quiero que te vayas, a la hora que yo quiera te detengo, anuncia la canción de José Alfredo Jiménez en la trama de quien se va y el que se queda.
Entonces hay de dos en la vida: los que se van por cuenta propia y los que gustosos se quedan, y en otra parte del drama lucen los que van a la fuerza y aquellos que deseando partir se quedan. En los matrimonios, en las sociedades y en el mundo entero habrá bastos ejemplo de ambos.
En un momento de este texto están quienes se van o emigran a lejanos países para mejorar su condición humana según ellos, cuando lleguen, a donde sea que lleguen serán los que llegaron, los foráneos en Monterrey serían «Chirigüillos». Si llegan de la ciudad de México serán los chilangos.
En otra canción ranchera se cuestiona con mucha razón al filósofo pueblerino: «cuál de los dos amantes sufre más pena, el que se va o el que se queda; el que se va se va suspirando y el que se queda, se queda llorando.
Algunos ya se fueron y ni cuenta se dieron, habrá de aquellos viajeros con un pie en el estribo que lo mismo sirve para bajar que para subir a un camión de volteo , hay que saber llegar. Llegar a tiempo, llegar aunque sea barrido y también despedirse a tiempo, soltar el presupuesto, retirarse en la sabia virtud de ponerle Jorge al niño.
A veces, luego de una larga ausencia, dices: ya llegó el que andaba ausente, y nadie sonríe. Llegas sin previo aviso y descubres el chahuistle: ¿de quién será esa pistola, de quién será el reloj en el buró?- y lo más desgraciado-: ¿de quién será ese caballo que en el corral relinchó? También hay unas reventadas chanclas abajo de la cama, no viste la foto de ella con otro en el lago, una camisa colgada, dos pesos sobre la cama y un boli sabor fresa en el refri con dos caguamas Indio bien muertas, como para una michelada. A la próxima mejor no te vayas.
La vida como es un péndulo, un vaivén, coincide con la voz romántica de José José, luego de unas copas la rockola suelta la de «te vas y vienes y a tu antojo te tengo» y es que en los romances nada es seguro, continuamente uno de los dos se anda yendo. Deberían irse juntos a chihuahua a un baile, pero en lugar de eso se casan y es como todas las cosas pasan.
Uno recuerda: la última vez que me fui estaba lloviendo, llegué bien mojado; me fui enojado y por alguna razón llegué muy contento. Eras un bebé cuando te fuiste, dice la abuela, ahora llegas hecho todo un hombre. Conque haya llegado, le digo.
Aquellos que llegan aún cuando nunca se fueron, porque estuvieron presentes en nuestras mentes, quizás no les recuerden allá de donde vienen, así es el abarrote.
De alguna manera hay el clásico pisa y corre, los que fueron por cigarros, los que siempre se andan yendo, los eternos concursantes que nunca se fueron. Los que anda buscando la NASA, traen ficha roja, tarjeta amarilla de un árbitro mexicano, pero probaron el agua del San Marcos y se quedaron.
Nadie sabe de dónde viene ni para dónde va. El viento nos lleva, el pensamiento viaja a cada rato a donde se le pega la gana. Uno sabe nadar de a muertito, correr para huir de nosotros mismos. Uno siempre añora estar en otro sitio, y por mientras salimos por un café y nos encontramos a Esteban que nos pregunta a dónde vamos, por mientras a un café, y después nadie sabe.
Sin muchas ganas de quedarte alguien te corre y te vas con mucho gusto, nadie pidió que te quedaras, qué más quieres, nadie rogó ni rezó un padre nuestro por que no te fueras. Te vas y a las dos cuadras te extrañan. «Nadie sabe lo que tiene» , dice un mensaje en el WhatsApp, pero ya vas llegando a Dinamarca. Llegas y nadie dio cuenta, no saliste en los diarios cuyos titulares debieron decir ya llegó fulanito, cuiden sus billeteras, no es cierto, lo más seguro es que nadie se entere de tu existencia. Y tampoco importa.
TENGO OTROS DATOS
ANUNCIÓ EL GOBERNADOR AVA QUE SU GOBIERNO DISPONE LA DONACIÓN DE TERRENOS PARA EL PROGRAMA DE VIVIENDAS PARA EL BIENESTAR
Gobernador Américo Villarreal y director general del Infonavit Octavio Romero se reúnen con desarrolladores de viviendas; agilizarán programa de casas para Tamaulipas y reiteran el compromiso de sumar esfuerzos y trabajar de manera coordinada para cumplir la meta del Programa de Vivienda para el Bienestar de 43 mil casas nuevas en Tamaulipas, para las y los trabajadores de menores ingresos.
Al presidir una reunión de trabajo, con la presencia de la alcaldesa de Tampico, Mónica Villarreal, y los alcaldes de Madero, Erasmo González Robledo, y de Altamira, Armando Martínez Manríquez, el gobernador reconoció la contribución de los desarrolladores de vivienda y constructores que se sumaron aquí a la iniciativa que impulsa la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Aquí están gobierno del Estado y municipios sumados a participar con ustedes para poder gestionar, agilizar y llevar a cabo todos los procesos de este gran programa de bienestar, expresó el gobernador.
«Estoy seguro de que con esta voluntad que se expresa en esta mesa y con la participación solidaria de todos ustedes, en esa vocación humanista de una sociedad participativa y colaborativa, en donde nos da gusto que te esté yendo bien a ti, porque es muy seguro que, si te va bien a ti, me va también bien a mí, podamos poder seguir avanzando en un México más justo, que sigamos construyendo la paz y que todos podamos vivir en bienestar», agregó.
En la reunión de trabajo, el director general del INFONAVIT, Octavio Romero Oropeza, anunció que, como parte del programa Vivienda para el Bienestar impulsado por la presidenta Claudia Sheinbaum, se contempla la construcción de al menos 30 mil viviendas en Tamaulipas, para personas que cotizan en el Instituto y que tienen ingresos de entre uno y dos salarios mínimos.
HASTA LUEGO