Escribo de lejos. Como si me fuese muy lejos de la ciudad y al acercarme allí estuvieran otra vez los cables de luz en el horizonte. Eso quiero para ver la perspectiva de las calles, la proporción de los árboles en primer plano, luego el fondo difuminado con edificios apenas visibles, inaudibles a esa distancia.

Pasado de largo en un rato más seré el mismo. He de ponerme lo mejor que hay para salir a la plaza de toros de donde no saldré en hombros. Lo intentaré una y otra vez como siempre. Me alejo un poco más y noto que el cuadro puede verse mejor a la distancia. Hago un ligero retoque con el pincel que está en el brazo y anotó la imagen ya frente al marco de las calles, pinto la esquina iluminada por la luna.

Puedo borrar el instante cerrando los ojos pero podría caer en la banqueta o resbalar en una rampa. Hay postes pequeños que anuncian un alto, hay que tener cuidado si alguien abre una puerta.

La calle principal por donde se entra es amplia como en todas las ciudades del mundo. Existe toda la gama de colores si los buscas en los reflejos de los aparadores. En las escaleras visuales subes y topas en lo alto, bajas con sólo bajar la mirada a terraplén, donde hay gente caminando.

O curre que cuando me alejo de la ciudad puedo recrearla, palparla con los pies y andar sobre de ella como quien anda sobre una alfombra, bueno como quien camina a sus anchas.

En la víspera del mediodía hay un espacio en blanco entre un párrafo y otro después del almuerzo, al salir por la puerta falsa del restaurante. Grabo de paso los ingredientes. La charla se cuela entre las mesas y la ciudad comienza el viaje para cruzar al otro lado después de la noche y quién sabe.

De todas maneras la luz se pilla. Hay quién recoge las sombras, instala otras más grandes y cuadradas, luego echa agua. La tinta blanca escurre con olor a sándalo después del aguacero de hace meses. El agua piensa que es un río e imagina el mar antes del semáforo en rojo.

Antes de cruzar detengo el paso, veo hacia todos lados y confío que nadie me sigue. Nadie podría ver lo que pinto oculto atrás del cubrebocas.

La sonrisa es extrema, lúdica, mazorca sinfónica, entre otras. Ahora nadie puede ver que en realidad estoy loco. Nadie tendrá una prueba que justifique a los hombres de la bata blanca. No a los hombres de negro que bailan.

Falta mucho por llegar al fondo de las cosas. En cada casa me van diciendo sus nombres, sus señas particulares, sus gestos más burdos antes de subirlas. Con el ángulo fijo instaló el tapiz y confirmó el enfoque nítido como el sonido de una campana de las que valen un billete. Es la hora del lápiz sobre el papel, el click tiembla antes que el dedo, la pieza musical comienza y los bailadores numerados para un concurso esperan que sus enemigos comience la tronadera.

Es fácil el ser humano de vez en cuando respirando, cruzando la calle igual que uno, escribiendo acaso la historia de otro que soy yo respirando, cruzando la calle, sudoroso.

Camino ahora más rápido de lo acostumbrado y profundizo en el marco de madera. Al fondo la niebla matutina poco a poco se disipa. Acá ya es mediodía y se puede ver la punta de la tarde en los manteles. La tregua es boca abajo en el pasto, cerca de donde pasa un río, escuchar eso, la música, leyendo a Whitman, no sé algo que comer en la fonda es la tarde.

Aquí en la ciudad que les dije. De cerca es un dije, la palma de una mano con sus líneas, los colores de un cuadro hecho con la espátula de las intermitentes luces de neón en lo que anochece.

TENGO OTROS DATOS

ANUNCIA GOBERNADOR AVA PROGRAMAS PARA EL MEJORAMIENTO DE VIALIDADES EN VICTORIA

Con júbilo fue recibido el anuncio del gobernador Américo Villarreal Anaya del inicio del programa para el mejoramiento de vialidades en ciudad Victoria, la capital del estado.

El programa tocará al menos 19 colonias, entre otras cuyo diagnóstico está en marcha, 28 mil metros cuadrados de asfalto para mejorar las vialidades con un beneficio directo a la población de ciudad Victoria

Incluye retiro de escombros, maleza, limpieza en colonias con un largo olvido como pueden ser, por señalar algunas, la colonia Mainero, las Flores, La Estudiantil, entre otras. Además se aclaró que hay colonias que se están diagnosticando para su mejoramiento integral.

Cumple el gobernador con esta obra que va en franca correspondencia a los propósitos de la 4ta Transformación que encabeza la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

HASTA LUEGO