Estoy en la Biblioteca y leo a Octavio Paz. Hasta no hace muchos años escribir de Octavio Paz pasaba por prohibitivo y sin embargo sus textos propios y los de sus amigos universales- que fueron bastos y suficientes- dejaron este bello remanso de textos entre ensayos, poemas, cuentos y reseñas que hoy leemos en la compilación de la Revista Vuelta de 1977 a 1996 y en los 8 tomos de su Obra Completa editada por el Fondo de Cultura Económica en 1993.

Vedado para los comenzales indefensos, para los licenciosos que oficiaban la penumbra desde gacetillas o desde misteriosos pasquines. Claro que vedado por parte de los ignorantes, o tendenciosos, que pensaban que no cualquiera podría escribir sobre el premio nobel, cuando Paz todavía no lo era.

Pero en los amplios círculos o en las menudencias de las cúpulas literarias tampoco se hablaba mucho de Octavio Paz, se decía en voz baja; tuvo enemigos poderosos en el ambiente literario. Lo velaron así por mucho tiempo, antes y después de muerto, hasta estos años, hasta no sé cuántos años más después.

¿Yo quién era? ¿y quién soy para escribir sobre Paz? Me decían que era muy pretenciosos. Bueno, fue en aquellos años y cuánta razón tenía esa elite. Era y sigo siendo muy fantasioso. Tal vez por eso escribo poemas.

Pero pretender hablar de una estética cuando no había estéticas, y ahora menos, no era del todo una grosería, era un insulto a los oferentes del mercado oficial de las letras.

Hay escritores por encargo. Suicidas de las letras que se tiran a matar en un periodo gubernamental, hacen una novela mediocre, jamás vuelven a escribir, y viven de eso. El ejemplo es nacional y recorre las islas, las profundidades de la literatura y las artes.

Pues hay un periodo muy amplio al concluir la segunda mitad del siglo y entrando en este, en que la ausencia de Paz es una loza. Hay letras que también cayeron muertas.

La falta de crítica y críticos, aunque una cosa no obligadamente conlleva a la otra, causó que se publicaran muchos libros, no siempre de calidad literaria, se siguen editando, a cambio de los otros, los que pudiesen tener un lector muy amable.

Los jóvenes no deben de leer a Octavio necesariamente, pero sí contar con las aproximaciones a su literatura, a su entorno, a su aura, al extremo de esa parte de la existencia desde donde él nos presenta la vida, desde el sentido crítico.

Doy por hecho que la gente ha leído sus poemas: Pasado en claro, Vuelta, Árbol adentro, Nocturno de San Ildefonso, entre otros, muchos, que le dieron el premio nobel de literatura a este mexicano. O tal vez esté familiarizada con sus ensayos como El laberinto de la soledad, Posdata, el arco y la lira, sobre Sor Juana, entre cientos que dedicó a la literatura. y al análisis político, la cultura y la sociedad.

Con Paz, muchos nos acercamos a las vanguardias idas, y las vivitas y coleando, al rompimiento, a la aglomeración de corrientes encontradas, o las no encontradas y dispersas por toda la república.

Nos enfrentamos a las grandes farsas. Descubrimos el hueso del surrealismo, las ocultas intenciones del simbolismo, sus huecos y sus frentes de batalla. La revista «Vuelta» atrajo a lectores ávidos que conseguíamos la revista por correspondencia.

De su vida privada y amorosa se sabe poco aunque mucho se sepa. Entre aquellas paredes la vida de un poeta es muy rica en esos términos. Su obra poética, la más hermosa proviene de ahí.

Su poesía deja en claro las sombras de los patios, los placeres de la vista al concurrir a una calle, ver un paisaje suave, los colores de un ave, las paredes de una casona, los techos de un viejo, un abuelo Irineo.

Disfruto la emisión de sonido nítido que emana del escritor leído muchas veces por uno mismo, disfrutemos su poema: Árbol adentro.

TENGO OTROS DATOS

AVA SE REUNIÓ CON FUNCIONARIOS DEL NADBank PARA IMPULSAR PROYECTOS ESTRATÉGICOS DE TAMAULIPAS

En reunión en Casa de Gobierno, el gobernador Américo Villarreal, presentó al director general del Banco de Desarrollo de América del Norte (NADBank), John Beckham, 14 de los proyectos estratégicos que impulsa la actual administración estatal y destacó el apoyo que ya ha brindado esta institución para el saneamiento de aguas residuales en la ciudad de Nuevo Laredo.

El Gobernador se refirió a proyectos como el Plan Hídrico Golfo Norte (PLHIGON), la segunda línea del acueducto de la presa Vicente Guerrero, la construcción del Emisor de Aguas Residuales de Monterrey a la presa Marte R. Gómez, el dique El Moralillo, la instalación de plantas desalinizadoras, la rehabilitación y tecnificación de los Distritos de Riego, el Centro Integral de Residuos, la Planta de Acopio y Reciclaje de Llantas, el Museo Interactivo de la Tortuga Lora y el Sistema Integrado de Transporte de Pasajeros tipo BRT.

En la reunión por parte del NADBank, también tomaron parte Carlos Carranza, director de Infraestructura Financiera Ambiental y Oscar Durán, titular de la Unidad de Relaciones Institucionales y Comunicación.

Por parte del Gobierno de Tamaulipas participaron Adriana Lozano Rodríguez, secretaria de Finanzas; Ninfa Cantú Deándar, secretaria de Economía; Karina Saldívar Lartigue, secretaria de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente; Tania Contreras López, consejera jurídica; Pedro Cepeda Anaya, secretario de Obras Públicas; José Ramón Silva Arizabalo, secretario de Desarrollo Energético; Raúl Quiroga Álvarez, secretario de Recursos Hidráulicos; y el jefe de la Oficina del Gobernador, Ricardo Guerrero Morales.

HASTA LUEGO