Un día, tras entregar un proyecto de calidad “urgente”, mi vida cambió; al tomar mis cosas para irme a casa, la cabeza me empezó a doler y un vértigo espantoso me obligó a sentarme. ¿Qué era? La respuesta llegó pronto: había desarrollado hipertensión.
¿Por qué? Las causas de la hipertensión son diversas; en mi caso era por el uso de la píldora. De acuerdo con la American Heart Association, éstas se encuentran asociadas a una elevación en la presión sanguínea de las mujeres que tienen sobre peso o alguna enfermedad renal leve.
¡Ten cuidado!
Además de los anticonceptivos, otras cosas que pueden detonarlo y de las que debes cuidarte son:
1.- Embarazo. Esta condición se conoce como hipertensión inducida por el embarazo (PIH), (también llamada presión gestacional)
2.- Tener sobrepeso.
3.-Comer alimentos altos en sal (sodio)
4.- No hacer ejercicio con regularidad.
5.-Fumar.
6.- Beber alcohol en exceso.
7.- Enfermedades suprarrenales y trastorno de la tiroides
8.- Apnea de sueño.
Si tienes más de 50 años, estás en la menopausia o familiares con alguna enfermedad cardiovascular, aumenta tu riesgo de padecer hipertensión. Razón por la que es muy importante que reduzcas tus niveles de ansiedad y procures acudir al médico una vez al año.
Recuerda, tu salud está en tus manos. ¡No lo dejes pasar!