Sabemos que en nuestro intestino viven diferentes bacterias, las cuales tienen una función importante. Sin embargo, también existen virus en este órgano; científicos encontraron que son más de 140 mil especies virales las que se pueden encontrar en este, la mayoría de ADN, diferentes al SARS-CoV-2.

¿Alguna vez habías escuchado sobre el microbiota intestinal? De acuerdo a la Sociedad Europea de Neurogastroenterología y Motilidad, el microbiota es el conjunto de microorganismos, es decir, bacterias, virus, arqueas, eucariotas, presentes en un entorno, en este caso, el tracto intestinal.

Es aquí donde se encuentra la mayor población de microorganismos del cuerpo humano, donde hay un ensamblaje de células bacterianas y humanas en cantidades comparables. Pero además de las bacterias, hay virus, frente a lo cual los científicos intentan comprender cómo afectan la salud humana.

Identifican más de 140 mil especies virales que viven en el intestino
Investigadores del Instituto Wellcome Sanger y el Instituto Europeo de Bioinformática de EMBL, informaron que se identificaron 140 mil especies virales que viven en el intestino humano, la mitad de las cuales nunca se habían visto, según reporta el estudio publicado en la revista Cell.

Esto se descubrió tras analizar más de 28 mil muestras de microbioma intestinal (término también usado para definir los microorganismos dentro de nuestro cuerpo) de diferentes partes del mundo y es una gran oportunidad para la investigación que permita comprender cómo los virus que habitan el intestino afectan la salud humana.

Los virus que habitan el intestino, son llamados bacteriófagos, los cuales pueden infectar a las bacterias. Esto podría repercutir en un desequilibrio en el microbioma intestinal, que a su vez puede contribuir a enfermedades y afecciones complejas como la enfermedad inflamatoria intestinal, alergias y obesidad.

En este estudio, los investigadores utilizaron un método de secuenciación de ADN llamado metagenómica, con el que exploraron y catalogaron la biodiversidad de las especies virales, identificando más de 140 mil en el intestino humano.

Los implicados, explicaron que la mayoría de las muestras provenían de personas sanas que no compartían ninguna enfermedad específica (recordemos que no todos los virus son dañinos). Asimismo, la mayoría de estos virus tienen ADN como material genético, contrario a lo que ocurre con muchos patógenos conocidos, como el SARS-CoV-2 (causante de covid-19) y el Zika, que son virus de ARN.

Por otro lado, se identificó un nuevo clado (grupo formado por una rama filogenética constituida por una especie y todos sus descendientes) de alta prevalencia, al que se refieren como Gubaphage, considerado el segundo grupo de virus más prevalente en el intestino humano, después del crAssphage, descubierto en 2014.

Al parecer, ambos virus infectan tipos similares de bacterias intestinales, sin embargo, no se conocen las funciones exactas del Gubaphage.

Estos resultados forman parte de la base de datos de fagos intestinales, que contiene 142 mil 809 genomas de fagos no redundantes, considerado un recurso invaluable para quienes estudian los bacteriófagos y su papel en la regulación de la salud de nuestras bacterias intestinales y la salud en general.

¿Qué son los bacteriófagos?
Los bacteriófagos o fagos, son virus que infectan a las bacterias y, al igual que otros virus, varían en su material genético y forma, pudiendo constar de ADN o ARN y contener 4 o cientos de genes, según explica la Khan Academy.

Estos virus también se usan para el tratamiento de afecciones asociadas a la presencia de bacterias patógenas, gracias a su capacidad para matar las bacterias al infectarlas y destruirlas.

Es importante recordar que los virus y las bacterias no son lo mismo, pese a que ambos son microscópicos y pueden causar enfermedades, según señala la entidad formada por empresas farmacéuticas y biotecnológicas en Argentina, caeme.

Por un lado, los virus son más pequeños y no son células completas, sino simplemente material genético empaquetado en una cubierta proteica y necesitan otras estructuras celulares para reproducirse, es decir, no pueden sobrevivir por sí solos a menos que vivan en otros organismos vivos.

En contraste, las bacterias son organismos unicelulares que se nutren del ambiente en que viven y pueden causar problemas como caries, infecciones urinarias, de oído o faringitis estreptocócica. Sin embargo, no siempre producen enfermedades, tal es el caso de las intestinales, que contribuyen al buen funcionamiento del sistema digestivo.

Finalmente, al ser diferentes, su tratamiento también difiere, destacando que los antibióticos sólo ayudan a atacar a las bacterias y no los virus; no tomes estos medicamentos a menos que sean indicados por un médico.

Sin duda, pese a tantos años de investigaciones, aún hay cosas que no sabemos del cuerpo humano. Sin embargo, investigaciones como estas no acercan a conocer más sobre su funcionamiento y los microorganismos en su interior, así como la forma en que pueden afectar nuestra salud.