Después de haber vivido más de 10 años en el infierno de las drogas, estar al borde de la muerte y perdido todo lo que tenía económicamente, hoy Mauricio Clark, de 35, ha regresado a la vida y no va a desperdiciar esta oportunidad de seguir adelante y ayudar a otros jóvenes a dejar sus adicciones.

Desde el lugar en donde se internó durante 50 días, el reportero nos relató: «Yo era el que me quería casi, casi, matar. Estaba en un infierno. Hoy valoro que se mueven mis manos, mis pies, mi corazón late bien; no tengo daño cerebral, veo excelente, aunque tengo que arreglarme los dientes, porque esos sí se dañaron. En mi nariz no hay arreglo, se me hizo chiquita, se hundió el tabique, está perforado; ¡pero estoy vivo!».