Una monja argentina residente en España armó gran revuelo en la Iglesia española al afirmar en un programa de televisión que María no fue virgen, tras lo que hoy fue desautorizada por el obispado al que pertenece su congregación dominica.

Lucía Caram, monja dominica contemplativa nacida en Tucumán, dijo entrevistada en el programa “Chester in love” emitido el pasado domingo en el canal Cuatro dedicado al sexo que ella creía que “María estaba enamorada de José y que era una pareja normal”. “Y lo normal es tener sexo”, afirmó.

La monja opinó que “cuando se bendice tanto desde la Iglesia el matrimonio y el tener hijos entiendo que sea muy difícil asumir la virginidad”. “Para demostrar que no había nada a José lo dibujan viejo y con barba”, agregó más polémica aún. Caram consideró que la Iglesia tendría que “haber presentado a María y José de otra manera y entender que es una relación madura de amor que se abre la vida y que es capaz de gestar y de fecundar un proyecto de liberación, de salvación”. La monja subrayó que la Iglesia durante mucho tiempo consideraba el sexo “sucio y oculto. Era la negación de lo que yo creo es una bendición”.

Consultada durante el programa, Caram, de 51 años, dijo que es virgen y que no se masturba. Caram, que reside en un convento de las dominicas en Manresa (Barcelona) y se prodiga en los medios de comunicación, abogó porque la Iglesia haga “una puesta al día de nuestro mensaje” ya que “el placer no es malo. Lo que se tendría que condenar es cuando hay un placer utilitarista del otro”.

La monja preguntó “por qué nos hemos dedicado durante tanto tiempo a condenar si lo más importante y lo más condenable no es todo el tema del sexo (…)? Lo más importante es el tema de la justicia, cómo se rigen las relaciones del dominio sobre el otro”.

A su juicio, en la Iglesia “tiene que haber una revolución y empieza a haber una revolución. Las iglesias están vacías. El mensaje no tiene credibilidad. El único mandamiento es amarás con todas las fuerzas y lo único que hemos hecho es limitarlo, minimizarlo y quedarnos en tonterías”. El Obispado de Vic, al que pertenece la congregación dominicana de Manresa (Barcelona) de Lucía Caram, emitió hoy una nota oficial para desautorizar a la monja por decir que María no fue virgen. En la nota el obispado defendió que “forma parte de la Iglesia, desde sus inicios, que María fue siempre virgen”.

Añadió que “esta verdad de la fe fue recogida y proclamada de manera definitiva por el Concilio II de Constantinopla, siendo el primer dogma mariano y compartido por los cristianos católicos y ortodoxos”.

El obispado lamentó “la confusión que hayan podido crear en el pueblo fiel” las declaraciones de la monja. Caram respondió en un comunicado, remitido a ANSA, que “si alguien se sintió ofendido, pido disculpas” y se reafirmó en que “quise manifestar que no me escandalizaría si (María) hubiera tenido una relación de pareja con José su esposo”.

Esto “escandalizó a muchos, tal vez porque no hubo espacios para matizaciones, pero creo que quedó claro mi fidelidad y amor a la Iglesia, al Evangelio y al proyecto de Jesús, así como la certeza de que el sexo no es sucio ni algo condenable y que el matrimonio y el sexo son una bendición”. La monja dijo que le “preocupa la lectura fragmentada, ideológica y perversa que algunos martillos de herejes, sedientos de venganza y animado por el odio, han hecho llenando de calumnias, amenazas serias, incluso a mi vida, en diversos medios”.

(A PARTIR DEL SEGUNDO 40)