Buenos Aires, Argentina.-Durante nueve años una adolescente argentina fue esclavizada y sometida a un trato infrahumano. La policía pudo rescatarla el pasado 5 de abril luego de allanar la casa donde ella vivía con sus padres adoptivos. Pesaba solo 20 kilos.

La menor, de apenas 15 años y con solo 20 kilos, había vivido por casi una década encerrada en el garaje de una vivienda, en el barrio de Villa Lugano (Buenos Aires). Compartía su cautiverio con un perro y un mono, cuyas sobras eran su alimento.

Según informa El país.com, los padres sustitutos golpeaban a la niña con cinturones sin importar la fragilidad de la niña, quien sufre «desnutrición» y «problemas de salud mental».

Fue gracias a que su hermana biológica empezó a buscarla y con el apoyo de la justicia se puso fin a una vida marcada por la tortura.

Fuentes del Ministerio de Seguridad de la Nación han explicado, en declaraciones al diario argentino «Clarín», que los padres adoptivos al parecer rendían culto a «San La Muerte», ya que en la vivienda se encontró un altar a ese santo y numerosas imágenes de ese culto.

ejb